NOTICIA 2

OTRO MENOR INVOLUCRADO EN ACTOS VIOLENTOS


El pasado sábado, en el barrio La Chacona del poblado, alrededor de las 9:00 pm fue acorralado un menor de 16 años por dos hombres que no pertenecían a su barrio.

A su casa llegaron dos hombres, los cuales preguntaban por el joven Yesid. El, muy asustado ya que vio en sus manos el arma, de inmediato les respondió que no estaba, que para que lo buscaban, a lo cual uno de los hombres le contesto, “lo necesitamos a él, díganos por favor donde esta, son problemas que solo podemos arreglar con el”. La reacción del joven fue decirles que el era el hermano, que seguramente el les podría ayudar, pero estos se negaban a decirle los motivos de su búsqueda.

Ya cuando los hombres estaban a punto de irse, aparecieron los padres del joven, quienes ya habían escuchado la discusión, y de inmediato el padre les dijo que cual era el problema, que él era el padre, pero los hombres nuevamente se negaron a dar sus razones.

Viendo Yesid que no iban a decirle nada, decidió decirles que él era Yesid, y de una forma grosera les advirtió: “yo soy Yesid, díganme cual es el problema y quién los mandó, que yo no le tengo miedo a nadie”. La reacción de los hombres fue muy calmada, solo le dijeron que le iba a pesar haber golpeado días antes a su amigo Olmer, más rabia sintió el joven al escuchar aquel nombre; era con quien días antes había tenido una pelea.

La pelea fue ocasionada por el joven, quien según la gente del barrio, “cree que puede pegarle a nuestros hijos cuando él quiera, y no nos respeta ni a las mujeres” dice Mónica, una víctima del joven, a quien este ha agredido física y verbalmente.

Todo fue porque Olmer, el agredido, estacionó su taxi afuera de la cancha donde el joven y sus amigos estaban jugando, y en medio del juego uno de los jóvenes tiró el balón y le dio al taxi sin culpa. Lo único que hizo Olmer fue pedirles el favor que tuvieran más cuidado, pero ante esto el joven Yesid lo insultó y lo golpeó, sin justa razón. Siendo menor de edad, Olmer no quiso hacerle nada en el momento. Pero al parecer envió dos de sus amigos para que hicieran algo con el joven para no verse involucrado.

Al ver el padre de Yesid que estos hombres tenían un arma decidió llamar a la policía para solucionar el problema de la manera adecuada. Y después de un rato de dialogo entre los agentes y el señor Olmer, estos decidieron que la mejor solución que podían darle al problema era que ninguno de los dos podría hacer algo contra el otro, ni podían acercarse.

Aún así, la gente del barrio sigue esperando una solución para el trato que este joven tiene con ellos.